Popularmente, son conocidas como «manchas solares». Evidencian que la piel envejece y que el sol ha dejado su huella en ella. No requieren tratamiento médico, pero pueden eliminarse por motivos estéticos en Dermaesthetics.
Léntigo solar
Básicamente, la lentiginosis solar es la aparición en la piel de pequeñas máculas oscuras, de color marrón, fruto del paso del tiempo y la exposición prolongada al sol. También se conocen como léntigos seniles.
Causas
Que no cunda el pánico. En algunas ocasiones, la susceptibilidad del ser humano al observar manchas en la piel le llevará a preocuparse, preguntándose, “¿y si es síntoma de una enfermedad grave?”.
En primer lugar, hay que consultar al dermatólogo, quien debe realizar un diagnóstico diferencial con el léntigo maligno y la queratosis actínica pigmentada, ambas lesiones malignas que no se pueden dejar de diagnosticar. Una vez descartada la malignidad, se puede proceder, o no, al tratamiento estético. Los léntigos solares suelen comenzar a manifestarse a partir de los 30 años, especialmente en personas que por motivos lúdicos o laborales se han expuesto excesivamente a la radiación solar. Por este motivo, los léntigos solares tienden a aparecer en pieles más claras, presentándose en las partes del cuerpo humano que están más en contacto con el sol: cara, hombros, manos o pecho, por ejemplo.
Dermaesthetics llevando a cabo el tratamiento de léntigos solares.
Paralelamente, la lentiginosis solar está estrechamente asociada al fotoenvejecimiento, proceso en el que la piel se va deteriorando con el paso de los años y suele acompañarse de la formación de arrugas (elastosis actínica).
La principal causa de la lentiginosis solar es la hiperproducción de melanina. Asimismo, la variación del grosor en las capas de la piel, la alteración de la circulación sanguínea en la piel, la disminución de células encargadas de sintetizar la elastina y el colágeno o la atrofia de la unión de las capas dérmica y epidérmica son otras posibles causas de la aparición del léntigo solar.
Tratamiento
Se pueden combatir, reducir e incluso eliminar completamente los léntigos solares mediante láser, luz pulsada o cremas despigmentantes. En algunos casos, puede utilizarse crioterapia con nitrógeno líquido, aunque el resultado estético suele ser peor.
Con Dermaesthetics, adiós a los léntigos solares: observa el antes y el después
En Dermaesthetics podemos asesorarte y orientarte en el diagnóstico y tratamiento de la lentiginosis solar. Ponte en contacto con nosotros, plantea tus dudas y te daremos una respuesta.
«Siempre he tomado mucho sol y las manchas en la cara me acomplejaban bastante. El tratamiento en Dermaesthetics ha sido súper indoloro. Ante cualquier duda, podíamos llamar a la clínica o directamente al doctor. Hicimos una segunda visita para ver cómo había evolucionado la piel»
Paciente en Dermaesthetics
Después del tratamiento, Dermaesthetics evalúa, comprueba y realiza un seguimiento del resultado. Esto se logra a través de una segunda visita clínica, en la que se observa cómo ha evolucionado la piel y cómo ha asimilado el tratamiento.
Además, durante el proceso del tratamiento de los léntigos solares se realizan diferentes sesiones en las que se llevan a cabo «repasos», tantos como sean necesarios para completar dicho procedimiento estético.
