La dermatitis de contacto alérgica es aquélla que se produce porque la persona expuesta es alérgica a esta sustancia, es decir, produce una respuesta exagerada del sistema inmunitario al entrar en contacto con esta sustancia que se llama alérgeno. Esta inflamación frente a esta sustancia determinada no la presenta cualquier persona sino únicamente las personas alérgicas a esta sustancia. Las alergias se adquieren con el tiempo, es decir, no nacemos alérgicos a una sustancia determinada sino que nos volvemos después de haber estado en contacto con esta sustancia. Los alérgenos más comunes son las plantas como la hiedra, el níquel y otros metales, los adhesivos, los medicamentos antibióticos (especialmente los aplicados en la piel), el bálsamo de Perú, las fragancias en perfumes, el esmalte de uñas, el látex,
Algunos productos causan reacción sólo cuando están en contacto con la piel y están expuestos a la luz del sol (fotosensibilidad). Entre ellos se encuentran las cremas para afeitar, los protectores solares, antibióticos tópicos (especialmente los que contengan sulfamida), algunos perfumes, productos con alquitrán de hulla y aceites con cítricos (limón o naranja). Hay algunos alergenos aerotransportados, es decir, que están en el ambiente, como algunos insecticidas.
El tratamiento consistirá en eliminar el agente desencadenante y durante el brote aplicar medicamentos tópicos y/u orales para controlar el picor y la inflamación.